Mira el siguiente video, lo más probable es que tu bosteces también
Lo mismo sucede siempre que estas cerca de alguien bostezando. Se le conoce como bostezo contagioso
Científicos creen que es a causa de la parte del cerebro responsable de las funciones motoras.
Sabemos que la imitación es una parte fundamental del desarrollo humano. Los humanos, igual que el resto de los simios, imitamos a los demás durante la infancia como forma de aprendizaje social.
Para entender porque tenemos la necesidad de imitar en primer lugar debemos tener en cuenta la existencia de neuronas espejo. Estas neuronas se activan al ver a otro realizar una acción y provocan una reacción paralela, reflejando las acciones del otro. En la mayoría de los casos la activación de estas neuronas no lleva siempre al movimiento, pues nosotros somos capaces de inhibir o bloquear la respuesta motora.
Existen varias enfermedades o trastornos del sistema nervioso que se relacionan con esta repetición involuntaria como la ecolalia (repetición involuntaria de frases) y la ecopraxia (repetición de movimientos) en las cuales la persona no puede suprimir ese deseo de imitar algo visto o aprendido.
Otra enfermedad relacionada es el síndrome de Tourette, en el cual estímulos muy pequeños pueden desencadenar tics o palabras sobre aprendidas por la persona y les es casi imposible suprimirlos.
Tomando esto en cuenta, por naturaleza tenemos la tendencia de imitar lo que vemos, y esta tendencia es mucho mayor para movimientos y acciones comunes, cosas que has hecho muchas veces y tu cuerpo puede hacerlas sin poner mucha atención en ellas (como bostezar).
- Los individuos con altos rasgos psicopáticos muestran menos susceptibilidad a los bostezos contagiosos
Si esto no fuera suficiente, hay estudios científicos que comprueban que la necesidad de bostezar solo aumenta mientras más quieras suprimirla, así que no hay escapatoria.
¿Cuántas veces bostezaste mientras leías este artículo?
Lo mismo sucede siempre que estas cerca de alguien bostezando. Se le conoce como bostezo contagioso
Científicos creen que es a causa de la parte del cerebro responsable de las funciones motoras.
Sabemos que la imitación es una parte fundamental del desarrollo humano. Los humanos, igual que el resto de los simios, imitamos a los demás durante la infancia como forma de aprendizaje social.
Para entender porque tenemos la necesidad de imitar en primer lugar debemos tener en cuenta la existencia de neuronas espejo. Estas neuronas se activan al ver a otro realizar una acción y provocan una reacción paralela, reflejando las acciones del otro. En la mayoría de los casos la activación de estas neuronas no lleva siempre al movimiento, pues nosotros somos capaces de inhibir o bloquear la respuesta motora.
Existen varias enfermedades o trastornos del sistema nervioso que se relacionan con esta repetición involuntaria como la ecolalia (repetición involuntaria de frases) y la ecopraxia (repetición de movimientos) en las cuales la persona no puede suprimir ese deseo de imitar algo visto o aprendido.
Otra enfermedad relacionada es el síndrome de Tourette, en el cual estímulos muy pequeños pueden desencadenar tics o palabras sobre aprendidas por la persona y les es casi imposible suprimirlos.
Tomando esto en cuenta, por naturaleza tenemos la tendencia de imitar lo que vemos, y esta tendencia es mucho mayor para movimientos y acciones comunes, cosas que has hecho muchas veces y tu cuerpo puede hacerlas sin poner mucha atención en ellas (como bostezar).
- Los individuos con altos rasgos psicopáticos muestran menos susceptibilidad a los bostezos contagiosos
Si esto no fuera suficiente, hay estudios científicos que comprueban que la necesidad de bostezar solo aumenta mientras más quieras suprimirla, así que no hay escapatoria.
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